domingo, 21 de noviembre de 2010

La última inocencia

Partir
en cuerpo y alma

Partir
deshacerse de las miradas
piedras opresoras
que duermen en la garganta

He de partir
no más inercia bajo el sol
no más sangre anonadada
no más formar fila para morir

He de partir

Pero arremete ¡viajera!

Alejandra Pizarnik

miércoles, 17 de noviembre de 2010

¿En qué medida?

En qué medida la sociedad puede reconocer verdaderamente su autocreación en su institución, reconocerse como instituyente, autoinstituirse explícitamente y superar la autoperpetuación de lo instituido y mostrarse capaz de retomarlo y de transformarlo de acuerdo con sus exigencias propias y no de acuerdo con la inercia de aquél, de reconocerse como fuente de su propia alteridad. He aquí las cuestiones, la cuestión de la revolución que no sólo supera las fronteras de lo teorizable, sino que se colocan de entrada en otro terreno. Si lo que decimos tiene algún sentido, este terreno es el terreno propio de la creatividad de la historia.



Cornelius Castoriadis, La institución imaginaria, pp. 342.

sábado, 6 de noviembre de 2010

..motivos..

"Él [Rousseau] está obligado a decir: Yo escribo y mi mano no está guiada por la naturaleza depravada, yo escribo pero mi espíritu no está animado por el deseo de caerle bien a la gente. Además, yo escribo y necesariamente me retraigo, me encapsulo en mi soledad. Porque si yo confiara en aquellos a quienes les escribo, estaría concediendo al status quo. Escribo como tirando una botella en el mar".

José Luis Galimidi,
clase teórico-práctica de filosofía política,
Rousseau y el Discurso...