sábado, 7 de junio de 2008

Un piloto en su navío

¿En qué consiste un piloto en su navío? La expresión, célebre por quien fuera considerado el inaugurador de la tradición moderna de la filosofía, remite a un individuo que se desplaza en el mundo por su navío (Descartes preocupaba que se comprenda la dualidad sustancial en el caso del cuerpo propio como una sustancia dentro de otra), y no por su cuerpo. Nosotros no padecemos el problema de la dualidad, estamos en el mundo informatizado; pura información, pura virtualidad, pura nada, como recuerdan los nihilistas. Acaso algún individuo excesivamente diurno conciba que hablar de la nada es nocivo para la realidad, porque lo real es crudo, porque lo real es ente, pero lejos de ello, con tratar sobre la nada no se juega una novedad estética ni en el pensamiento ni en la actividad sobre la realidad en la que se especula de modo inerte el movimiento entre las relaciones dadas del mundo real, precisamente, hay una cuestión abandonada en todo este asunto: la contingencia de acontecer. Sólo podemos padecer información en este mundo virtual de información, sólo podemos articular información en este mundo. Aquí, cualquiera que estime aprehensible la inteligibilidad de lo real, cualquiera que juzgue transformable la realidad, ante todo, será un piloto en su navío desplazándose en la nada.